Boletín nº 89: El pueblo que caminaba en tinieblas vio una luz grande.

Queridos amigos de la Dinámica de Oración por las Vocaciones Amor de Dios: 

 El pasado domingo hemos iniciado el tiempo de adviento. Es un tiempo para abrir nuestro corazón al Señor que viene, es un tiempo de esperanza, de confianza en el Dios fiel, pues Él cumple siempre su palabra, y la ha comprometido hasta el extremo de dárnosla encarnada en su propio Hijo, como testimonio de su fidelidad.

 Que María, la Virgen del Adviento, nos ayude a no considerarnos dueños de nuestra vida, a no poner resistencia cuando el Señor viene para cambiarla, a estar preparados y dejarnos visita por Él.

Unidos en la espera y en la oración.

Hna. Gloria Álvarez
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